Ley de la segunda oportunidad, ¡guía para que no te pierdas en el camino!

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¿Puedo reestructurar mis deudas? ¿Tengo beneficio de exoneración? Son muchas las preguntas que nos hacemos acerca del derecho y el deber como ciudadanos responsables pero no siempre obtenemos respuesta. La ley de la segunda oportunidad, en lo que se refiere a las cuestiones que hemos manifestado, es la única que puede decirnos algo al respecto pero dependiendo de la situación que en ese momento tengamos o los papeles que hayamos presentado estaremos ante una posición u otra distinta.

¿Qué vamos a ver?

¿Qué es la ley de la segunda oportunidad?

Podemos definir la ley de la segunda oportunidad como aquella que permite a un deudor insolvente sanear su patrimonio de manera activa y una vez que lo ha conseguido proceder al cobro de algunos de sus acreedores. Si bien el concepto parece bastante sencillo, lo cierto es que hay determinados puntos que debemos tener en cuenta para que todo salga según lo establecido. En España, el ordenamiento jurídico se rige por un principio de responsabilidad patrimonial universal y de no cumplir con este poco hay que podamos hacer.

Regulado en el artículo 1911 del Código Civil, nos encontramos ante un modelo mediante el que asumiendo una deuda, hay que responder a la misma con todo el patrimonio (tanto presente como futuro) y de esta manera no podremos evitar ningún tipo de pago mientras tengamos algún bien o derecho del que estemos disfrutando o esté bajo nuestros dominios. En cualquier caso, gracias a la ley que analizamos, la posición del deudor insolvente se ve protegida y bastante reforzada.

¿Cuáles son los requisitos para acceder a la ley de la segunda oportunidad?

Ahora que sabemos en qué consiste la ley de la segunda oportunidad y lo que podríamos hacer con ella, el siguiente paso será conocer si podemos acceder a ella de forma natural o necesitamos de ayuda judicial. Para estar al día son muchos los puntos que debemos tener en cuenta pero es importante que no miremos esta opción como una forma de evadir nuestras responsabilidades. A continuación, para que compruebes como funciona, te dejamos algunas cosas de orden:

Objeto de un concurso culpable

No puedes ser objeto de un concurso culpable. Cualquier persona que esté en una situación tal deberá justificar (de forma bastante estricta) las razones por las que se le ha declarado como tal puesto que es la única manera de salir adelante. Una declaración de culpabilidad agrava de forma inmediata los efectos del evento y es por eso que para facilitar la tarea, no debes bajo ningún concepto falsificar ni ocultar ningún tipo de documentación al respecto.

Incurrir en determinados delitos

Los delitos de contenido económico o social no son amigos de la ley de la segunda oportunidad. Siempre que pensemos en esta como una opción para nuestra libertad es importante que valoremos determinadas pautas relacionadas con el patrimonio, los derechos de los trabajadores o la falsedad documental y es que si hemos cometido alguna de estas faltas lo ideal será que nos pongamos en manos de los mejores abogados porque recibir el dinero no será una de nuestras opciones.

Actuar de buena fe

Una ley que se ha creado como mecanismo para el buen pagador debe ser atacada de buena fe. Si tenemos ideas mezquinas hacia ella o pensamos en viciar su contenido nuestra recomendación será que te quites de aquí cuanto antes o que valores las cosas más de una vez antes de lanzarte a ellas. Negociar un acuerdo extrajudicial de pagos (como ha hecho mucha gente) es la idea principal que hay cuando el desarrollo no se ha hecho en condiciones pero, ¿sabremos la manera de atacarla?

Pagar determinados créditos

Al menos un 25% de los créditos ordinarios deben ser abonados de manera corriente. En ocasiones pensamos que una ley como esta nos exime de hacer cualquier pago pero nada más lejos de la realidad puesto que solo se nos está ofreciendo algo de oxígeno ante situaciones que no podemos sostener y que por desgracia se han vuelto en nuestra contra. Es importante tener todos los conceptos ordenados puesto que algunos como los créditos públicos y los alimentarios quedan fuera del beneficio de exoneración.

Deber menos de cinco millones de euros

Aunque la cantidad parezca desorbitada hay personas que deben mucho dinero a razón de las deudas que van acumulando a lo largo de su vida y es que siempre que podamos acogernos a una ley parece que existe esa posibilidad de dejar todo para mañana. Esta que tenemos aquí no posibilita números mayores a cinco millones de euros así que si ese es tu caso deberías pensar en otra alternativa para que esa morosidad que tienes sea saldada.

¿Es positiva la ley de la segunda oportunidad?

Ahora que hemos visto todo lo que supone la famosa ley de la segunda oportunidad puede que estés pensando en cuáles son los puntos a favor y si realmente ganamos algo con el hecho de acogernos a la misma. Solo mirando el detalle de que podemos empezar de nuevo se podría decir que ya estamos sacando ventaja de la situación que ahora mismo barajamos. En ocasiones las deudas que hemos acumulado a lo largo de los años no nos dejan respirar e impiden que seamos nosotros mismos pero, ¿quién dice que no merecemos rectificar sobre lo ocurrido?

Con todo a su favor, esta ley nos permite un tiempo más para poner solución a esas dudas que ahora mismo acumulamos. Siempre con algo de cautela y contando con buenos abogados será la mejor alternativa para que tú, que no sabes qué hacer con lo que debes, tengas la oportunidad real de empezar de nuevo. Si bien hay algunos apartados para los que no sirve, lo cierto es que para muchas personas es la mejor flexibilidad que hayan podido conocer. ¡No dejes de consultarla!

Me llamo Sonia y soy assistant desde hace años en un bufete de abogados. Me apasiona tanto todo lo relacionado con la jurisprudencia que me animé a escribir este blog con el que pretendo ayudarte, para que sepas cómo tienes que actuar ante determinadas circunstancias de la vida.

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